- Xiaomi fija su entrada en Europa para comercializar sus coches eléctricos en 2027, confirmada por Lu Weibing.
- SU7 y YU7 parten como candidatos para el desembarco; se replicará el modelo de negocio aplicado en China.
- Impulso financiero: 81.302 entregas en el trimestre y 20.600 millones de yuanes en ingresos del negocio de vehículos eléctricos.
- Retos clave: homologaciones, posibles aranceles, notoriedad de la marca en automoción y capacidad productiva.
La compañía tecnológica china ha puesto fecha a su salto al automóvil en el viejo continente: Xiaomi prevé vender sus coches eléctricos en Europa en 2027. El movimiento llega tras un trimestre de resultados al alza y con el objetivo declarado de empezar por el mercado que consideran más exigente.
El presidente de la empresa, Lu Weibing, trasladó a los analistas que «esperamos entrar oficialmente en el mercado europeo en 2027», al tiempo que adelantó que la firma trabaja en homologaciones, red comercial y notoriedad específicas para la región, sin detallar por ahora un plan de producto cerrado para Europa.
Calendario y estrategia de entrada
Weibing fue claro al definir el enfoque: Europa será la primera parada fuera de China para su división de automoción porque es el «mercado más difícil». La empresa aspira a replicar en el exterior la fórmula que le ha funcionado en casa, con una combinación de venta directa, servicios posventa y ecosistema tecnológico.
El fabricante reconoce que su reconocimiento de marca en smartphones roza el 95% en mercados como España, pero que debe trasladar ese activo a los coches antes de iniciar la comercialización. «Antes de 2027 hay que resolver la notoriedad de la marca Xiaomi en automoción y cómo despertar el interés del usuario», expusieron desde la dirección. notoriedad de la marca Xiaomi en automoción
La compañía asegura que ya ha puesto en marcha los preparativos técnicos y regulatorios para su desembarco. Entre las tareas figuran pruebas de seguridad, certificaciones europeas y la definición de la estrategia de precios y garantía para competir con actores consolidados.
De momento, Xiaomi no ha comunicado el catálogo que ofrecerá en la UE, pero sí anticipa que mantendrá su metodología de negocio y de producto basada en integrar hardware, software y servicios conectados, tal y como hace en China.
Modelos previstos y posicionamiento
En el radar de la marca aparecen sus dos lanzamientos más recientes: la berlina SU7 y el SUV YU7, con los que apuntan directamente a segmentos dominados por Tesla y otros fabricantes globales. El enfoque es prestaciones competitivas y precios ajustados para ganar tracción en la fase inicial.
El ritmo de demanda en China ha sido intenso. El YU7 acumuló 240.000 pedidos en sus primeras 18 horas y la gama SU7 ha incorporado versiones de altas prestaciones que han elevado el precio medio de venta. Xiaomi ha reiterado que, aunque la recepción es positiva, aún debe validar el encaje de producto para Europa.
En el mercado chino, el YU7 parte desde 253.500 yuanes, mientras que la familia SU7 se sitúa por debajo en el arranque, con variantes superiores que impulsan el valor medio. En Europa, la compañía esperará a definir oferta y posicionamiento tras los procesos de homologación y pruebas.
La firma también está reforzando su capacidad de diseño con fichajes como el del exresponsable de BMW i, Kai Langer, con la intención de adaptar la estética y los acabados a los gustos del público europeo. reforzando su capacidad de diseño
Resultados y músculo financiero del proyecto
El último trimestre consolidó el impulso del área de automoción: 81.302 vehículos entregados entre abril y junio, un 197,7% más interanual. Los ingresos de la división de coches eléctricos alcanzaron 20.600 millones de yuanes, apoyados en más entregas y en un mayor precio medio.
Según la compañía, el precio medio por unidad subió un 10,9% hasta 253.662 yuanes, efecto en parte de versiones como el SU7 Ultra. La línea de negocio de vehículos eléctricos, IA y otras iniciativas sumó 21.263 millones de yuanes y ya representa el 18,3% de los ingresos del grupo.
A nivel consolidado, Xiaomi registró un beneficio neto atribuido de 11.904 millones de yuanes, un 133% más, con una facturación total de 115.956 millones de yuanes. El negocio de smartphones e IoT aportó 94.693 millones de yuanes, demostrando la resiliencia del core tecnológico que sostiene la expansión hacia el automóvil.
El negocio de vehículos eléctricos redujo pérdidas hasta los 300 millones de yuanes en el trimestre, una mejora sustancial frente a periodos anteriores. La dirección mantiene que la división se acerca a la rentabilidad operativa a medida que ganan escala y optimizan la mezcla de producto.
Preparativos en España y despliegue comercial
En paralelo, la marca mueve ficha en España con contrataciones para ingeniería, operaciones y atención al cliente, y con el diseño de una red de alrededor de 30 centros de servicio autorizados, pieza clave para la atención posventa.
La estrategia contempla un ensamblaje local a partir de kits para acelerar plazos y testar la demanda, con la vista puesta en una fabricación más completa en fases posteriores si el mercado responde.
En cuanto a la distribución, Xiaomi prevé combinar concesionarios físicos en grandes ciudades con una potente plataforma online para reservas y ventas, de modo que cubra tanto al cliente tradicional como al digital.
Se espera que, si la demanda replica lo ocurrido en China, puedan aparecer unidades en el mercado de ocasión poco después del lanzamiento oficial, acelerando la presencia de la marca en calles y carreteras españolas.
Retos regulatorios, aranceles y reputación de marca
El aterrizaje en la UE exigirá superar homologaciones, pruebas Euro NCAP y estándares de seguridad. Además, el contexto comercial incluye los aranceles a vehículos eléctricos de origen chino y la negociación en torno a posibles precios mínimos en el bloque comunitario.
La empresa señala como prioridad elevar la notoriedad de Xiaomi en automoción para situarse en la mente del consumidor europeo, apoyándose en su base tecnológica y en una relación calidad-precio que ya ha validado en otros productos.
Otro desafío será escalar la capacidad productiva para ajustar plazos de entrega. En China, la alta demanda del YU7 ha tensionado los tiempos de espera, un factor a vigilar si el lanzamiento europeo tiene una recepción similar.
Con estos elementos, el plan pasa por cerrar la brecha regulatoria y operativa a lo largo de los próximos meses, ajustar la oferta a cada mercado y asegurar una red de ventas y servicio que esté a la altura de los estándares europeos.
Todo apunta a que 2027 será el punto de partida para ver coches eléctricos de Xiaomi matriculados en Europa, con SU7 y YU7 como avanzadilla y un respaldo financiero en clara progresión; por delante, homologaciones, aranceles, notoriedad y capacidad serán las piezas que determinen la velocidad y el alcance de su desembarco.
