Solidaridad Mecánica y Orgánica
Las relaciones entre personas pueden ser clasificadas en dos tipos principales: Solidaridad Mecánica y Solidaridad Orgánica.
Solidaridad Mecánica
La Solidaridad Mecánica es aquella que, a grandes rasgos, se basa en la repetición y en una gran uniformidad. Esta solidaridad se caracteriza por una dependencia estructurada entre los individuos, en la que cada uno conoce su función y las necesidades de los demás a su alrededor.
Ejemplo: Por ejemplo, una colmena de abejas. Los individuos dependen unos de otros para conseguir la colaboración grupal.
Solidaridad Orgánica
La Solidaridad Orgánica es la que se muestra en una sociedad moderna. Aquí los individuos tienen una mayor libertad de expresión y participación en la toma de decisiones, lo que produce un mayor sentimiento de responsabilidad.
Ejemplo: Una asociación sin ánimo de lucro, un gobierno democrático, etc.
Es importante entender que no se trata de una opción u otra, sino más bien de una combinación de las dos. La Solidaridad Mecánica es necesaria para mantener la estabilidad de la sociedad, mientras que la Solidaridad Orgánica ofrece la oportunidad de mejorar la sociedad con el tiempo. Los dos tipos de solidaridad son necesarios para la convivencia, cooperación y bienestar de la comunidad y el medio ambiente.
Solidaridad mecánica y orgánica
La solidaridad mecánica y la solidaridad orgánica son dos tipos de relaciones sociales que, en última instancia, tienen la misma finalidad: facilitar el desarrollo social.
Solidaridad mecánica
La solidaridad mecánica, también conocida como solidaridad primaria, se refiere a las interacciones basadas en la dependencia, en las que un miembro de la sociedad se ve obligado a actuar con el fin de satisfacer sus necesidades. Esto puede ser en el ámbito económico, político, educativo o religioso.
Por ejemplo, los trabajadores reciben un salario a cambio de realizar un trabajo; o bien, los padres dan orientación y consejo a sus hijos.
Solidaridades orgánicas
La solidaridad orgánica, también llamada solidaridad secundaria, se basa en el comportamiento autoimpuesto, donde el individuo toma decisiones en función de lo que supone un comportamiento adecuado.
Esta forma de solidaridad se ha desarrollado como respuesta a las maneras de actuar de otros. Y es lo que comúnmente conocemos como «cortesía» o «educación».
Por ejemplo, recibir a un huésped con una sonrisa o mostrar deferencia hacia los demás en la vida cotidiana.
Ventajas de la solidaridad mecánica y orgánica
- Ayuda a construir confianza: al ayudar a los demás, mostramos que somos capaces de confiar en los demás y que tenemos una responsabilidad social.
- Promueve relaciones interpersonales saludables: al ayudar a los demás, se desarrollan relaciones más fuertes entre las personas.
- Promueve una cultura del trabajo en equipo: al trabajar juntos hacia un objetivo común, se promueve la colaboración y el trabajo en equipo.
- Fomenta el respeto: al demostrar respeto hacia otros, creamos un ambiente propicio para relaciones saludables.
En conclusión, la solidaridad mecánica y orgánica, en última instancia, tienen el mismo objetivo: mejorar las relaciones sociales para promover el desarrollo social.
Estas formas de solidaridad son parte integral de una sociedad saludable.
Solidaridad mecánica y orgánica
La solidaridad es un concepto que engloba varios aspectos: la sensibilidad y el compromiso de cuidar a los demás y el proceso de participación en acciones destinadas a ayudar a la comunidad. El concepto se somete a dos enfoques diferentes de acuerdo con la perspectiva con la que se encarne: la solidaridad mecánica y la solidaridad orgánica.
Solidaridad mecánica
La solidaridad mecánica es aquella que involucra el cumplimiento de determinadas normas para asegurar el bienestar de la comunidad. Esta forma de solidaridad se refiere al cumplimiento de leyes, reglas e imposiciones que tienen un carácter moral o jurídico para alcanzar la armonía general. Esta solidaridad es considerada como mecánica porque se da debido al cumplimiento de reglas, sin importar los sentimientos personales. Ejemplos comunes de solidaridad mecánica son:
- El cumplimiento de leyes y normativas: mantenerse en la ley evitando los delitos y cumpliendo con los impuestos adecuados.
- El cumplimiento de reglas establecidas: relaciones de trabajo armoniosas para los empleados en una empresa o respetar las reglas del tráfico en las carretaras.
- La solidaridad colectiva: los miembros de una comunidad se unen para velar por el bien común.
Solidaridad orgánica
La solidaridad orgánica es aquella que se sostiene por principios morales. Estos principios están basados en la sensibilidad de uno mismo hacia otros, sin imposiciones ni normativas establecidas. En este caso, la solidaridad se centra en que la persona se comprometa y colabore con el objetivo sin que nadie la obligue a hacerlo. Esta forma de solidaridad puede manifestarse de diversas maneras, tales como hacer donaciones en pro de causas humanitarias o sin fines de lucro, ayudar a alguien en necesidad, realizar acciones en contra de la discriminación o iniciativas educationales o comunitarias. También, uno de los ejemplos más notorios es el don de órganos, lo cual se realiza sin ningún tipo de forzamiento, sino beneficiando a alguien generosamente.
En conclusión, la solidaridad es un concepto clave que abarca los aspectos humanitarios y sociales, y puede manifestarse en dos formas: la mecánica y la orgánica. La solidaridad mecánica se basa en el cumplimiento de las normativas al pie de la letra, mientras que la orgánica es un compromiso de uno mismo hacia los demás en virtud de la empatía y la beneficencia.