- Las gafas inteligentes de realidad aumentada evolucionan hacia modelos más ligeros y prácticos, como las Rokid Max 2.
- Surgen iniciativas de aprendizaje y formación gratuita en tecnologías XR, accesibles sin conocimientos técnicos previos.
- Samsung y otras grandes marcas estudian el futuro de la realidad aumentada apostando por dispositivos experimentales como Project Moohan.
- La realidad aumentada se posiciona como tecnología clave para el ocio, la productividad y la innovación educativa.
La realidad aumentada sigue ganando presencia en nuestro día a día, consolidándose como una de las tecnologías más prometedoras para cambiar la forma en la que interactuamos con el mundo. En los últimos tiempos, hemos visto cómo algunos de los principales actores del sector, junto con emergentes propuestas chinas, están apostando por dispositivos que ya no están pensados solo para los aficionados más avanzados. Ahora, las gafas de realidad aumentada se presentan con diseños más discretos y funcionales, adaptándose tanto al ocio como a la productividad o el entretenimiento digital.
Este impulso tecnológico no llega únicamente de la mano de grandes compañías. Crecen las iniciativas de formación y acceso a las tecnologías XR (realidad aumentada, virtual y mixta) tanto para profesionales de sectores como la salud, como para cualquier persona interesada en sumarse a la digitalización práctica, incluso sin saber programar. Además, la industria explora nuevas alianzas y prueba dispositivos que buscan redefinir el futuro de la movilidad y la comunicación.
Gafas de realidad aumentada: más ligeras, versátiles y accesibles
El panorama de las gafas inteligentes ha cambiado notablemente. Donde antes solo había productos dirigidos a jugadores o entusiastas, ahora encontramos modelos como las Rokid Max 2 que apuestan por la comodidad, la portabilidad y la estética. Estas gafas permiten disfrutar de una pantalla virtual de hasta 200 pulgadas visible solo para el usuario, en cualquier lugar y sin configuraciones complejas.
Su diseño recuerda mucho más a unas gafas de sol convencionales, pero con tecnología de última generación bajo el capó. Poseen resolución Full HD en cada ojo, niveles de brillo adecuados y colores vivos, lo que las hace ideales para ver películas, series o trabajar sin depender de la tele tradicional. Su peso ligero y apariencia discreta las convierten en una opción atractiva para quienes quieren consumir contenido en movimiento, ya sea en el transporte público o durante viajes de trabajo.
La facilidad plug & play de las Rokid Max 2 facilita la conexión con móviles, tabletas, portátiles y consolas, transformando cualquier entorno en una sala multimedia privada. Esto ofrece una ventaja especialmente útil para quienes comparten espacios o desean disfrutar de ocio digital sin molestar a nadie.
Entre las funcionalidades más innovadoras, destaca su capacidad para conectarse por HDMI con consolas tan populares como PlayStation, Xbox y Nintendo Switch, así como con dispositivos portátiles como la Steam Deck o un PC gaming. De este modo, los jugadores pueden disfrutar de partidas en pantalla gigante sin necesidad de ocupar el televisor del salón, con un sonido envolvente y baja latencia.
El ecosistema puede complementarse con accesorios como la Rokid Station 2, que convierte las gafas en un centro multimedia autónomo con Android. Esta pequeña estación permite instalar aplicaciones, acceder a servicios de streaming, navegar por internet o incluso jugar en la nube, agregando mayor flexibilidad para usuarios exigentes.
Formación gratuita en XR: una oportunidad para todos
No hace falta ser programador ni experto en tecnología para iniciarse en el mundo de la realidad aumentada y las realidades extendidas (XR). Un ejemplo destacado es el curso gratuito promovido por la Fundación Universitaria del Área Andina, que está abierto a cualquier persona con acceso a internet y ganas de aprender sobre estas soluciones inmersivas.
La formación, completamente online y orientada a principiantes, ayuda a entender los conceptos clave de la AR, VR y MR, sus aplicaciones en sectores como la educación, la medicina o la cultura, y enseña a diseñar experiencias interactivas sin tener que escribir código. Los módulos permiten avanzar en el aprendizaje a ritmo propio, desarrollando habilidades como la creatividad, el pensamiento crítico y la innovación aplicada.
El objetivo es facilitar que cualquier ciudadano pueda crear y aplicar soluciones basadas en XR para los retos de su entorno laboral o personal. El curso, con un enfoque práctico, promueve el uso de plataformas accesibles como Spatial o WebAR, e incentiva a que los participantes desarrollen proyectos reales.
