En la última década, la robótica colaborativa y la inteligencia artificial (IA) han estado en constante evolución, marcando un antes y un después en cómo operan diversos sectores productivos. Estas dos tecnologías combinadas están transformando no solo fábricas e industrias, sino también sectores como el hotelero y logístico. Con la llegada de cobots, robots capaces de trabajar codo a codo con los humanos, las empresas han llegado a nuevos niveles de automatización, eficiencia y seguridad.
Los cobots con IA están diseñados para compartir espacios de trabajo con los humanos, facilitando tareas que anteriormente podían ser tediosas o peligrosas. Ya no hablamos de robots que operan en áreas aisladas, sino de máquinas que cooperan directamente en entornos compartidos, aprendiendo y adaptándose a ellos mediante visión 3D e inteligencia artificial. La capacidad de los cobots para manejar nuevas situaciones sin necesidad de ser programados cada vez es una realidad más palpable.