- Claude Code ya puede usarse desde el navegador y ofrece una vista previa para iOS.
- Integración con GitHub, ejecución en paralelo y seguimiento en tiempo real.
- Entornos sandbox aislados, proxy seguro para Git y control de dominios.
- Disponible como vista previa para planes de pago Pro y Max en claude.ai.
La herramienta de programación de Anthropic da un salto importante con la llegada de Claude Code en versión web y una vista previa en iOS. A partir de ahora, los desarrolladores pueden iniciar y supervisar trabajos desde el navegador, con ejecución en la nube y sin instalar nada en local, algo especialmente útil para equipos que trabajan de forma distribuida en España y el resto de Europa, apoyada en infraestructura de IA.
El cambio no es solo de interfaz: la plataforma habilita flujos asíncronos, integración directa con GitHub y agentes que ejecutan trabajo y control fino de permisos, de modo que es posible dejar tareas corriendo en segundo plano y revisar avances cuando convenga, con seguimiento en tiempo real y capacidad de redirigir al agente sin reiniciar procesos.
Qué aporta el salto al navegador
Desde la pestaña de código en claude.ai, los usuarios de pago pueden iniciar sesiones sin abrir la terminal, conectar repositorios de GitHub y delegar tareas bien definidas (corrección de errores, refactorizaciones o cambios de backend) para que el agente trabaje en instancias gestionadas por Anthropic.
La interfaz permite lanzar varias tareas en paralelo, ver el progreso y el razonamiento del agente, y crear Pull Requests de forma automática cuando la propuesta queda lista para revisión, lo que agiliza los ciclos de validación y merge.

Acceso, disponibilidad y versión móvil
La compañía ofrece esta capacidad como vista previa de investigación para suscriptores Pro y Max. La experiencia web se complementa con una app de iOS en fase temprana que sirve para revisar resultados, completar tareas pequeñas y consultar el estado de las sesiones en marcha.
El cliente de línea de comandos (CLI) se mantiene para quienes prefieren la terminal, pero la versión web rebaja la barrera de entrada y facilita la supervisión visual. La disponibilidad regional queda sujeta a las políticas del servicio de Anthropic, también en territorio de la UE.

Seguridad: sandbox, proxy y control de red
Cada sesión se ejecuta en un entorno aislado (sandbox) con límites claros sobre sistema de archivos y red, reduciendo la superficie de ataque y el riesgo de accesos no deseados durante la automatización de cambios, un tema recogido en el debate sobre su seguridad.
Las interacciones con Git pasan por un proxy seguro que media todo el tráfico, de modo que el agente solo opera sobre repositorios autorizados. Para entornos corporativos, es posible definir listas de dominios permitidos o desactivar el acceso a la red, equilibrando productividad y cumplimiento, y alineando con la inversión en ciberseguridad.
Trabajo en paralelo y flujos asíncronos
La plataforma está pensada para gestionar múltiples repositorios desde una única interfaz, con resúmenes de cambios, diffs y progreso visible, apoyada en centros de datos robustos. Esto ayuda a paralelizar correcciones de bugs, tareas de mantenimiento o pequeñas mejoras de producto.
Mientras el agente avanza, el desarrollador puede intervenir en tiempo real para dar instrucciones adicionales o ajustar prioridades sin interrumpir la ejecución, lo que acorta iteraciones y evita reinicios costosos.
Tecnología y modelos de IA
Más allá de autocompletar, el foco está en agentes que ejecutan trabajo de forma autónoma bajo supervisión humana, con énfasis en trazabilidad y control de permisos para integrarse en procesos existentes.
Competencia y contexto del mercado
El movimiento sitúa a Anthropic frente a alternativas como GitHub Copilot o las propuestas de Google (p. ej., Code Assist/Jules), que también exploran agentes capaces de clonar repositorios, ejecutar pruebas y proponer cambios desde la nube.
En Europa, la adopción vendrá marcada por requisitos de seguridad y cumplimiento, por lo que el aislamiento por sesión, el proxy de Git y la posibilidad de acotar dominios pueden resultar decisivos para equipos que manejan código sensible.
Cómo empezar sin complicarse
Para ponerlo en marcha basta con acceder a claude.ai, conectar un repositorio de GitHub y definir permisos de red y dependencias. A partir de ahí, es posible crear tareas, revisar el progreso y aprobar Pull Requests cuando el resultado encaje con el objetivo.
Como buena práctica, conviene describir con precisión el alcance de cada tarea y mantener revisiones pequeñas y frecuentes, aprovechando la ejecución en paralelo sin perder control sobre los cambios.
El lanzamiento abre la puerta a una forma más flexible de programar: automatizar lo repetitivo, supervisar lo importante y mantener la seguridad como eje del proceso, tanto para equipos pequeños como para organizaciones con necesidades más estrictas.