- El 21% de usuarios de internet en México ha sido víctima de ciberacoso, principalmente mujeres y jóvenes.
- Las formas más frecuentes de ciberacoso incluyen contacto por identidades falsas, mensajes ofensivos y llamadas intimidantes.
- WhatsApp y Facebook son las plataformas más utilizadas para ejercer el ciberacoso, seguidas de llamadas telefónicas.
- La mayoría de las víctimas no conoce a su agresor y poca gente denuncia formalmente; el impacto emocional es notable en mujeres.
El ciberacoso constituye una de las principales problemáticas ligadas al uso de internet en México. Durante el último año, la presencia digital se ha consolidado en todos los sectores sociales; sin embargo, este avance tecnológico también ha traído consigo riesgos y amenazas a la seguridad y bienestar emocional de los usuarios. Los datos más recientes muestran que más de 18.9 millones de personas han experimentado alguna forma de acoso digital.
Las situaciones de ciberacoso no distinguen edad, pero afectan mayoritariamente a mujeres y personas jóvenes. Además, diversas plataformas sociales y de mensajería, lejos de funcionar exclusivamente como canales de interacción, se han convertido en espacios recurrentes para la violencia digital. Comprender el alcance actual de este fenómeno resulta clave para diseñar estrategias de prevención y apoyo.
¿Quiénes son las principales víctimas del ciberacoso?
De acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), el 21% de las personas de 12 años o más que usan internet ha sido víctima de ciberacoso. Las cifras revelan que las mujeres presentan una incidencia superior (22.2%) en comparación con los hombres (19.6%). Entre los menores y adolescentes, el impacto también es relevante: cerca del 27.6% de los adolescentes y un 31.1% de mujeres jóvenes entre 20 y 29 años han sido objeto de algún tipo de acoso digital.
Por otro lado, las incidencias tienden a disminuir conforme avanza la edad. El grupo de adultos mayores de 60 años reporta una prevalencia muy inferior, con cifras que apenas superan el 6%.
¿Dónde ocurre con mayor frecuencia el ciberacoso?
El riesgo no es igual en todo el país. Según el informe, Yucatán encabeza la lista de entidades con mayor prevalencia de ciberacoso, alcanzando el 29.7% de los usuarios. Le siguen San Luis Potosí (26.9%), Hidalgo (26.2%), Tlaxcala y Querétaro. Por el contrario, los estados de Morelos (15.1%), Tamaulipas (16.1%) y Baja California (16.2%) presentan los niveles más bajos de este problema digital.
En términos absolutos, Estado de México es la entidad con mayor número de personas afectadas, con 2.48 millones, seguida de Jalisco, Ciudad de México y Veracruz.
Formas más comunes de ciberacoso y plataformas implicadas
- Contactos utilizando identidades falsas: El 36% de las víctimas reportó haber sido contactada de esta manera.
- Envío de mensajes ofensivos: Esta modalidad afectó al 34% de quienes sufrieron acoso.
- Llamadas ofensivas o intimidatorias: Han impactado al 22.6% de los casos.
- Difusión de contenido sin consentimiento y mensajes de índole sexual: También se han identificado como formas relevantes de acoso.
Las redes sociales y aplicaciones de mensajería aparecen como los escenarios principales para estas agresiones. WhatsApp (39.8%) y Facebook (39.7%), junto con las llamadas telefónicas (29.3%), lideran la lista de medios empleados para hostigar y acosar a los usuarios.
¿Quién acosa y cómo reaccionan las víctimas?
El anonimato prevalece en los casos de ciberacoso en México. Cerca del 63% de las personas afectadas declaró no conocer la identidad del agresor, mientras que un 21.6% mencionó que se trataba de personas conocidas y el resto indicó haber sufrido acoso por parte de conocidos y desconocidos.
El género del agresor también se manifiesta con claridad: el 57% de los hombres víctimas identificó a varones como responsables, dato que en el caso de las mujeres escala al 52.1%. El miedo, el enojo (58.6%) y la desconfianza (36.7%) son algunas de las emociones más experimentadas tras sufrir un episodio de acoso digital. En particular, las mujeres reportan un mayor impacto emocional, con el miedo presente en el 34.5% de los casos.
Al momento de reaccionar ante estos ataques, las acciones más habituales son:
- Bloquear al agresor o cuentas: 66.6% de las víctimas optó por esta medida.
- Ignorar o no responder: Estrategia utilizada por el 14.1%.
- Presentar denuncia formal: Solo el 11.2% tomó esta vía ante autoridades o proveedores digitales.
- El cierre de cuentas o perfiles es una decisión que toma únicamente el 4.9% de las personas acosadas.
El tiempo en línea y la vulnerabilidad al acoso
Un dato que llama la atención es el promedio de horas que pasan conectadas las víctimas de ciberacoso, que alcanza las 5.5 horas diarias, frente a las 4.6 horas del resto de la población. Este hecho refuerza la idea de que a mayor exposición digital, más riesgos hay de ser afectado por este tipo de conductas.
Acciones preventivas y protección digital
Ante la creciente amenaza del ciberacoso, el 74.2% de los internautas ha implementado alguna medida de protección. Destacan la creación o modificación de contraseñas (95.9%), la actualización de antivirus o cortafuegos (19.7%), la decisión de no compartir información privada (14.7%) y el uso de la autenticación de dos pasos (7.4%). La configuración de privacidad en redes sociales es menos común, aunque recomendable.
Todas estas acciones, aunque son relevantes, resultan insuficientes si no van acompañadas de campañas de educación digital y un trabajo conjunto entre autoridades, empresas tecnológicas y sociedad. Es fundamental dotar a los usuarios de herramientas efectivas para identificar, reportar y frenar el acoso online antes de que escale a consecuencias más graves.
La lucha contra el ciberacoso en México permanece como un reto urgente e ineludible. Los números reflejan la necesidad de avanzar hacia una mayor cultura de prevención, apoyo institucional y justicia digital real, entendiendo que el bienestar y la seguridad de millones de personas está en juego en cada interacción online.