- Atlas integra ChatGPT en la navegación: resúmenes, ayuda para escribir y consultas desde una barra lateral.
- El modo agente automatiza tareas con límites y medidas de seguridad; está en beta para Plus, Pro y Business.
- Privacidad reforzada: memoria opcional, modo incógnito, controles parentales y gestión fina de datos.
- Disponible ya en macOS para cuentas gratuitas y de pago; Windows, iOS y Android llegan más adelante.
OpenAI ha presentado ChatGPT Atlas, su apuesta por un navegador que combina navegación web y asistencia conversacional en un mismo espacio. La idea es que el usuario pueda moverse por Internet y, a la vez, pedirle cosas al asistente sin cambiar de ventana ni copiar y pegar.
De momento, Atlas está disponible para macOS a nivel mundial tanto para cuentas gratuitas como de pago, con versiones para Windows, iOS y Android en preparación. La compañía lo define como un proyecto en desarrollo, con ampliaciones de funciones previstas y una distribución en beta para entornos Enterprise y Edu.
Qué es ChatGPT Atlas y qué ofrece
La interfaz de Atlas recuerda a ChatGPT: pestañas, historial y marcadores conviven con una barra lateral que entiende la página abierta y permite pedir resúmenes, explicaciones o acciones rápidas por texto o voz. También se puede dividir la vista para mantener el chat a la derecha mientras se navega.
Aunque OpenAI no ha detallado oficialmente el motor, las pruebas apuntan a que se apoya en Chromium, lo que favorece la compatibilidad con sitios y estándares modernos. En la práctica, el navegador funciona como una ventana tradicional, pero con una capa de IA que comprende el contenido y el contexto de lo que estás viendo.
Desde la página de nueva pestaña es posible introducir una URL o escribir una consulta; el sistema devuelve resultados y, cuando procede, los organiza por enlaces, noticias, vídeos o imágenes. Además, un botón tipo “Preguntar a ChatGPT” facilita lanzar peticiones sin abandonar la web actual.
Atlas incorpora una memoria opcional que, si se activa, recuerda temas y sitios para retomar búsquedas o sugerir pasos siguientes. Esta función puede consultarse, editarse o borrarse en cualquier momento desde el panel de configuración.
Modo agente: tareas automáticas y límites de seguridad
El modo agente, similar a otros agentes autónomos, permite delegar acciones en el propio navegador: desde recopilar información y abrir pestañas hasta añadir productos al carrito o revisar documentos que el usuario indique. La función está en fase beta y disponible para suscriptores de Plus, Pro y Business.
Para minimizar riesgos, el agente funciona con frenos claros: no ejecuta código, no descarga archivos, no instala extensiones y no accede a otras apps ni al sistema de archivos del dispositivo. En sitios sensibles —como banca en línea— las acciones automáticas se pausan para pedir confirmación.
El usuario conserva el control en todo momento con opciones visibles para detener, pausar o retomar la actividad del agente. Además, existe un modo desconectado que limita qué datos y páginas están a su alcance, útil para entornos con información confidencial.
OpenAI advierte que esta tecnología no es infalible: los agentes pueden equivocarse y ser susceptibles a instrucciones ocultas en páginas o correos maliciosos (prompt injection). Por ello, se han incorporado salvaguardas y un diseño de permisos para reducir comportamientos indebidos.
Privacidad, datos y control del usuario
La configuración de Atlas prioriza el control del usuario: por defecto, el contenido que se navega no se usa para entrenar modelos de IA, salvo que el propio usuario lo active de forma explícita en los ajustes.
La memoria del navegador es totalmente opcional y puede revisarse, archivarse o eliminarse cuando se quiera. Borrar el historial asociado retira también esos recuerdos, de modo que la personalización no compromete la gestión de los datos.
En cuanto a privacidad, el navegador ofrece modo incógnito, que evita guardar actividad y desconecta temporalmente la sesión de ChatGPT. También es posible decidir qué sitios “ve” el asistente mediante un interruptor en la barra de direcciones y establecer controles parentales heredados de ChatGPT.
Para mejorar la accesibilidad y la fiabilidad de las acciones, OpenAI sugiere que las webs incorporen etiquetas semánticas (por ejemplo, ARIA) que faciliten al agente entender la estructura de la página y actuar con mayor precisión sin invadir la privacidad.
Disponibilidad, instalación y primeras opciones
Atlas se puede descargar ya para macOS desde la web oficial de OpenAI. La instalación es similar a cualquier app: iniciar sesión con la cuenta de ChatGPT y completar una configuración inicial con idioma y preferencias de memoria.
Durante el primer arranque, el navegador permite importar contraseñas, historial y marcadores desde Safari, Chrome, Firefox o un archivo HTML, facilitando el salto desde otros navegadores. La experiencia está disponible en la Unión Europea desde el primer día sin necesidad de plan de pago.
Todo apunta a que, al basarse en Chromium, Atlas goza de alta compatibilidad con la mayoría de sitios y funciones de la web moderna. OpenAI planea lanzar versiones para Windows, iOS y Android más adelante y, como incentivo, ofrece límites ampliados en ChatGPT durante siete días si se establece Atlas como navegador predeterminado.
Además de la navegación conversacional, se incluye asistencia para escribir en línea (redactar o pulir textos en campos web) y comandos en lenguaje natural —por texto o voz— para acciones comunes como abrir pestañas recientes o localizar términos en el historial, lo que agiliza tareas rutinarias.
Con esta propuesta, OpenAI intenta colocar conversación, búsqueda y automatización bajo un mismo techo. La combinación de IA integrada, controles de seguridad y opciones de privacidad deja un navegador que se siente familiar, pero que suma herramientas prácticas para el día a día sin perder de vista el control del usuario.
