Castillos Medievales
Origen
Los castillos medievales son estructuras constructivas de la Edad Media. Desarrollaron un concepto nuevo y totalmente diferente a las murallas y fortalezas anteriores. Sin embargo, se inspiraron en los mismos. Comenzaron a construirse en el siglo IX con la llegada de los caballeros feudales, los cuales montaban guardia sobre el terreno para defender los bienes de sus señores. La definición de un castillo medieval es el conjunto de estructuras, walled y construcciones de un lugar.
Características
Los castillos medievales tenían varias características distintivas, tales como:
- Torres, muros y puertas: los castillos se construían como un complejo de vigilancia a todos los lados. Había varias torres, muros de piedra y puertas de entrada conocidas como portones. Estas estructuras se construían generalmente con materiales como piedra, adobe o madera.
- Fosos o trincheras: estos se usaban para aumentar la defensa del castillo. Estos eran generalmente profundos pozos llenos de agua alrededor de los muros para dificultar el acceso al castillo.
- Capillas: estas estaban ubicadas dentro de la estructura del castillo para oficiar servicios religiosos. Estas también eran usadas como lugar de almacenamiento de armas y alimentos.
Diferencias
Los castillos medievales eran muy diferentes a los castillos construidos antes o después de la Edad Media. Algunas de las principales diferencias incluyen:
- Diseño: Los castillos pre-medievales eran mucho más simples y estaban construidos con materiales básicos como tierra compactada, lascas de piedra y troncos de madera. Por otro lado, los castillos medievales eran más complejos y estaban construidos con materiales más fuertes e innovadores como la piedra caliza y los ladrillos.
- Función: Los castillos medievales no solo eran construidos como base militar y refugio, sino también como hogares para nobles, caballeros y sus sirvientes. Estas estructuras también alojaban algunas de las principales autoridades locales.
- Tamaño: Los castillos pre-medievales eran relativamente pequeños en comparación con los grandes complejos medievales. Estas últimas eran significativamente más grandes que sus predecesores, con estructuras más complicadas para asegurar una mejor defensa.
Los castillos medievales son una de las principales características de la Edad Media y su impronta todavía se reconoce hoy en día. Estas estructuras proporcionaron a los reinos medievales una protección física necesaria para que prosperará durante siglos.
¿Qué son los castillos medievales?
Los castillos medievales son edificios militares construidos desde el siglo IX principalmente para la defensa de un territorio. Dentro de éstos, los señores feudales construían residencia propias para ejercer sus funciones.
Origen
En tiempos de Antigüedad, los castillos tuvieron un surgimiento como consecuencia de la invasión de los pueblos Germánicos, los cuales acuñaron lo que se conoce como castrodurismo, es decir la construcción de recintos amurallados para su protección.
Características
Las edificaciones tenían por objetivo proteger a sus habitantes:
- Murallas, que rodeaban todo el complejo con torres ubicadas en los muros para vigilar y defender el castillo.
- Foso, para impedir el acceso al castillo enemigo.
- Casa señorial, palacio que albergaba a los señores, sus familias y cortes.
- Cuarteles, donde instalaban a las tropas de la guarnición.
- Iglesias, para satisfacer a las necesidades espirituales.
Diferencias
Los castillos en tiempos medievales tenían grandes y marcadas diferencias entre sí dependiendo del estado en que se encontraran.
- Aquellos bien conservados, seguramente tenían mucho símbolo de honor cuyos lienzos representaban la riqueza de sus dueños.
- Los antiguos, por el contrario, solían ser reconvertidos por sus nuevos dueños y no se veían mejor.
En conclusión, los castillos medievales eran unos grandes complejos amurallados con la finalidad de proteger y asegurar su control sobre el territorio, mostrando muchas diferencias entre los que, siendo bien conservados, mostraban el estado de riqueza y honor de sus propietarios en aquellos tiempos. Y los que, antiguos, sufrían reconversiones para su uso.