La caida de la Bastilla: Un evento histórico
El 14 de julio de 1789 es una fecha clave en la historia francesa. El evento conocido como la caída de la Bastilla representó el inicio de la Revolución Francesa, una revolución que duraría aproximadamente 10 años hasta la adopción de la Constitución de 1799. El muro de la prisión de estilo medieval, conocido como “La Bastilla”, fue asaltado y tomado por los campesinos y ciudadanos siguiendo la consigna de: “¡Pan, Libertad y Derechos Ciudadanos!”.
Los acontecimientos que desencadenaron la caída de la Bastilla
A lo largo de 1788, y en plena época del absolutismo, surgió una gran crisis política y social. Los iresignados, en plena época de absolutismo, estaban creciendo en su número y debido al desproporcionado reparto de los recursos la situación económica empeoraba de forma considerable. La situación se tornó insostenible y los acontecimientos que desencadenarían la caída de la Bastilla se desarrollaron progresivamente:
- 21 de mayo: Se convoca en París la Asamblea de Los Estados Generales, la cual se reuniría el 5 de junio. Los Estados Generales eran una reunión a la que acudían representantes del Tercer Estado (campesinos, artesanos, comerciantes, etc) con objeto de abordar asuntos de la Monarquía.
- 5 de junio: La Asamblea de Los Estados Generales se reúne en Versalles. El Tercer Estado se une para formar una nueva Asamblea con el objetivo de no permitir la adopción de ninguna medida mientras los privilegios de la nobleza y el clero no sean abolidos y la Constitución sea restaurada.
- 11 de julio: Se suspenden los Estados Generales. La nobleza y el clero se rehúsan a abdicar de sus privilegios.
- 14 de julio: Un grupo de campesinos, ciudadanos y soldados se apodera de la fortaleza de la Bastilla. Tras 8 horas de lucha, la Bastilla cae y el pueblo festeja.
Establecimiento de una nueva Constitución
Después de la caída de la Bastilla el pueblo exigía una nueva Constitución para la Francia así como un nuevo orden político en el que fueran abolidas todas las monarquías. Esto provocó la destitución de Luis XVI y la proclamación de la Declaración de los Derechos del Hombre y del Ciudadano. Este documento se convertiría en el impulso para la redacción de la Constitución de 1799.
Conclusiones
La caída de la Bastilla fue un acontecimiento de gran relevancia para la Historia de Francia. Fue el signo de un inicio de una nueva sociedad en la que se abogaría por los derechos del Hombre y del Ciudadano. Esta nueva Constitución se encuentra vigente hasta el día de hoy.
La caída de la Bastilla fue sin duda un hito en la Historia de Francia, no sólo por sentar las bases de una democracia, si no también por tener una gran repercusión a nivel mundial.
La Caida de la Bastilla 1789: Antecedentes
El 14 de julio de 1789, una multitud de ciudadanos armados tomaron la fortaleza de la Bastilla en París para reclamar los derechos de libertad y justicia. Esta acción pasaría a la historia como la caída de la Bastilla que simbolizaría el comienzo de la Revolución Francesa.
Motivos que llevaron al estallido de la revolución
Los principales motivos que contribuyeron a que la Revolución Francesa rompiese sus cauces y estallase fueron los siguientes:
- Injusticias sociales: Existían grandes discriminaciones entre los ciudadanos de diferentes estamentos. Los privilegiados dejaban en la pobreza a los demás.
- Relación con la Iglesia:El clero se beneficiaba con el pago de impuestos por parte de los ciudadanos. Esto llevó a una separación entre el Estado y la Iglesia.
- Gastos de la Corte: Los gastos de la corte eran excesivos. Esto desencadenó protestas en toda Francia.
- Déficit de productos y alimentos: El déficit de productos en Francia era muy alto. Esto provocó escasez y aumento de los precios.
Que significó la caída de la Bastilla?
La caída de la Bastilla simboliza el comienzo de la Revolución Francesa que estalló debido a todos los problemas anteriores que se referían a los derechos de los ciudadanos. El hecho de que los ciudadanos hubiesen tomado una prisión, jurando defender la Revolución, fue un símbolo de la determinación del pueblo por conseguir sus derechos.
Esto llevó a la Declaración de los Derechos del Hombre y del Ciudadano de 1789 y a una nueva Constitución en 1791, así como al establecimiento de una monarquía constitucional.
La caída de la Bastilla marcó un punto de inflexión en la historia de Francia y del mundo, pues sentó las bases de la democracia moderna.