- Desarrollo de prótesis caninas personalizadas gracias a la impresión 3D
- Dog Motion Studio se consolida como pionero en el uso de tecnologías digitales veterinarias
- El proceso de fabricación incluye escaneo anatómico y materiales ligeros y resistentes
- La iniciativa busca expandirse y hacer accesibles estas soluciones en Perú y Latinoamérica
La impresión 3D se ha consolidado como una herramienta innovadora en la medicina veterinaria, permitiendo la fabricación de prótesis personalizadas para perros con amputaciones. En Perú, un grupo de jóvenes provenientes de la Universidad de Ingeniería y Tecnología (UTEC) ha destacado por desarrollar soluciones ortopédicas de bajo coste, capaces de mejorar considerablemente la calidad de vida de las mascotas afectadas.
La historia de Jack, un perro que perdió una de sus patas delanteras tras un tumor, fue el motor que impulsó este proyecto. Dog Motion Studio, formado por estudiantes y egresados de Bioingeniería y Mecatrónica de la UTEC, diseñó para Jack una prótesis adaptada específicamente a sus necesidades, empleando tecnologías de escaneo tridimensional y modelado digital que luego se materializan mediante la impresión 3D.
Un proceso a medida para cada paciente canino
El método de trabajo de Dog Motion Studio se fundamenta en la personalización y precisión. Todo comienza con una evaluación veterinaria en colaboración con clínicas aliadas, donde se determina el estado físico y las necesidades individuales del animal. A continuación, se realiza un escaneo anatómico utilizando cámaras o escáneres portátiles, lo que permite crear un modelo digital fiel de la anatomía del perro.
El siguiente paso es el diseño digital de la prótesis, donde se emplean herramientas como CAD y Blender. El equipo considera factores clave como la ergonomía, el tipo de amputación y el nivel de actividad del paciente para garantizar un dispositivo funcional y cómodo. La fabricación se realiza con materiales ligeros y resistentes como ABS, PETG o TPU, y se finaliza con siliconas protésicas en los puntos de contacto para evitar molestias y roces.
Gracias a esta aproximación, los perros recuperan movilidad de forma segura y personalizada, ya que la prótesis se ajusta perfectamente al muñón o extremidad restante, facilitando la adaptación del animal y promoviendo una vida más activa.
Resultados y proyecciones a futuro
Hasta el momento, la iniciativa ha beneficiado a dos perros: Jack y Grau, ambos con amputaciones ligadas a enfermedades oncológicas. Mientras que el desarrollo de la primera prótesis requirió varios meses de experimentación y pruebas, la experiencia adquirida permitió a Dog Motion Studio reducir el tiempo de producción en el caso de Grau a tan solo un mes. Hoy, el objetivo del equipo es acortar este periodo a menos de una semana, optimizando los procedimientos y la adaptación de los animales a sus nuevas extremidades.
Uno de los elementos diferenciales del proyecto es su enfoque centrado en la biomecánica y en el bienestar animal, integrando conocimientos biomédicos y tecnología digital para crear soluciones únicas en Perú y la región.
De cara al futuro, el equipo aspira a consolidarse como un referente nacional en innovación biomédica veterinaria. Entre sus metas destacan la fabricación de más de un centenar de prótesis funcionales anualmente, la expansión a otras ciudades y países latinoamericanos, así como la diversificación de productos incorporando férulas, ortesis y asistentes motrices.
Innovación accesible para toda la región
Para facilitar la difusión y acceso a estas soluciones, Dog Motion Studio trabaja en la elaboración de una guía de fabricación abierta, con la intención de que otros equipos y profesionales puedan replicar el proceso en distintas regiones, especialmente en contextos de bajos recursos.
De igual forma, planean el desarrollo de una plataforma digital para la atención personalizada en colaboración con veterinarios, permitiendo asesorar y acompañar a los responsables de animales con amputaciones en todo el proceso de rehabilitación.
El éxito alcanzado en los primeros casos demuestra que la innovación tecnológica puede transformar de manera significativa el día a día de los animales y sus familias, ofreciendo alternativas antes impensables a bajo coste, ajustadas a las posibilidades de cada paciente y adaptables a distintas realidades socioeconómicas.
La apuesta por la impresión 3D y la personalización de dispositivos protésicos en veterinaria continúa abriendo puertas en Perú, posicionando al país como pionero en la región y mostrando cómo la colaboración entre la ingeniería y la empatía puede cambiar vidas. La dedicación del equipo, junto con el respaldo académico y veterinario, sienta las bases para que más mascotas recuperen su movilidad y bienestar, y para que este tipo de soluciones estén cada vez más al alcance de quienes las necesitan.